Aplicar la muerte cruzada es un derecho constitucional que tiene el Presidente de Ecuador, Rafael Correa Delgado, que consiste en disolver la Asamblea Nacional y las suyas, para convocar nuevas elecciones. Es decir se van todos.
Esta facultad se incorporó en el ordenamiento legal a partir de la Constitución de Ecuador de 2008 y se encuentra estipulada en el capítulo tercero llamado "Función Ejecutiva", sección primera consagrada a "Organización y funciones", en el artículo 148 de la Constitución.
Artículo 148 de la Constitución de la República de Ecuador: dice:
"La Presidenta o Presidente de la República podrá disolver la Asamblea Nacional cuando, a su juicio, ésta se hubiera arrogado funciones que no le competan constitucionalmente, previo dictamen favorable de la Corte Constitucional; o si de forma reiterada e injustificada obstruye la ejecución del Plan Nacional de Desarrollo, o por grave crisis política y conmoción interna.
Esta facultad podrá ser ejercida por una sola vez en los tres primeros años de su mandato.
En un plazo máximo de siete días después de la publicación del decreto de disolución, el Consejo Nacional Electoral convocará para una misma fecha a elecciones legislativas y presidenciales para el resto de los respectivos períodos.
Hasta la instalación de la Asamblea Nacional, la Presidenta o Presidente de la República podrá, previo dictamen favorable de la Corte Constitucional, expedir decretos-leyes de urgencia económica, que podrán ser aprobados o derogados por el órgano legislativo".
Este fue un clamor ciudadano que hoy es una realidad, tener esta opción democrática, frena la posibilidad de que la Asamblea saque de sus funciones al Presidente de la República, tal como sucedió en los casos de Abdala Bucaram y Lucio Gutiérrez, precisamente en este último caso el pueblo pidió que se vayan todos, pero se quedaron los diputados posesionando a otro Presidente de la República.
Pero de un tiempo acá hemos escuchado del mismo Presidente de la República decir que no descarta esta opción o posibilidad, frente a los problemas y últimos escándalos acontecidos en la Asamblea Nacional, donde la oposición ha obstaculizado las elecciones de sus autoridades principalmente la de los dos vicepresidentes y una discutida elección del presidente Cordero.
Como hemos dicho esta es una opción democrática del Primer Mandatario, pero, lo lógico sería que no sirva como una herramienta de presión para los asambleístas, sino como una herramienta efectiva cuando la Asamblea no cumpla con sus obligaciones u obstruya el Plan Nacional de Desarrollo.
Creo que el Presidente Correa tiene una enorme responsabilidad en sus manos, de decidir si aplica o no esta norma constitucional, ahora.
Porque anunciarlo como una alternativa a todo momento, puede confundir a los ecuatorianos, es decir, se puede creer que se está presionando a la Asamblea para su no aplicación.
En todo caso, si se aplica ahora, vamos a saber si realmente el Presidente Correa, es reelegido y aún cuenta con el respaldo de la mayoría de los ecuatorianos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario